El pasado sábado, día 12 de noviembre, se reunieron en el Real Colegio Mayor de San Bartolomé cerca de 90 Antiguos Colegiales de este Mayor, procedentes de las promociones de la década de 1980, en especial la promoción 1986-1987.
La cita era a las 7 de la tarde, y minutos antes ya estaban concentrados en la puerta decenas de Colegiales. Procedentes de diversas partes de España, de distintas edades, de distintas profesiones, todos coincidían en la misma reacción al entrar el Claustro: «Esto no ha cambiado nada», decían con ilusión al pasar la puerta del Colegio.
Los organizadores, de la promoción 86-87, habían preparado diversos Actos para conmemorar la reunión. Volvieron todos los Antiguos al Salón de Actos, y habló el Gran Caimán de aquella promoción, saludando a los presentes, que otrora muchos fueron sus novatos. Nada más comenzar el Acto interrumpían los oyentes al grito de: «San Juan de la Cueva, que llueva, que llueva» o «Canta el Makakafú».
Después habló el Rector del Colegio, impartiendo una breve lección inaugural. Quiero aprovechar para alabar la increíble memoria del Rector, que ya estaba en la Dirección en aquellos años, y 30 años después seguía recordando los nombres, apellidos, estudios y lugares de procedencia de todos los Antiguos Colegiales allí presentes (labor mucho más difícil si tenemos en cuenta lo que deberán haber cambiado las caras, o lo que habrán cambiado sus peinados; muchos de los Antiguos Colegiales decían cuando se referían a un compañero suyo: «¡Pero si tu antes tenías pelo!»).
Uno de los organizadores del Acto, Oscar Aguado, tomó la palabra en nombre de los Antiguos Colegiales, y habló brevemente sobre su época en el Colegio.
Yo tuve el honor de hablar, en último lugar, en nombre de los Colegiales. Mis palabras fueron muy breves y sólo señalaron el orgullo que nos supone a los Colegiales actuales ser los herederos de las tradiciones de éste Colegio Mayor, tradiciones que ellos indirectamente nos dejaron, al igual que a ellos les confiaron en su momento sus mayores. También recordé a todos los que fueron mis veteranos, hace ya 6 años, y hice una especial mención a los que fueron los Grandes Caimanes durante esos 5 años: Pocholo, Richard, Fali, Draculín y Minifa.
Como colofón a aquel Acto se mostraron fotografías de la época, de las actividades que organizaban, de cómo era el Colegio en definitiva, en aquellos años. Después del Acto siguió una misa en recuerdo de los Antiguos Colegiales y personal del Colegio que ya no nos acompañan, que tuvo lugar en la Capilla del Colegio.
Makakafú
Los que ahora somos Colegiales estábamos muy interesados en conocer cómo era la vida diaria del Colegio en aquella época, tan distinta a la actual. Después de todos los Actos, Colegiales Antiguos y Modernos compartimos una cena en el comedor del Colegio, donde nos contaron cómo era la vida colegial en sus días de Colegio. Lo que más veces se repitió era una palabra: «Makakafú». Ninguno sabíamos a qué se referían, decían que era una canción, y que: «¡¿Cómo no podíamos sabérnosla?!». Se resistían a enseñárnosla, me imagino que del mismo modo que nosotros nos resistimos hoy a enseñarle a los más jóvenes nuestro himno, «Pasa el Bartolo».
Pero al final no pudieron resistir más y la cantaron, y gracias a que los reporteros de Revista Gasparini estaban allí presentes, podemos presentarles el famoso «Makakafú»:
